La plataforma ProntoPro, a través de su Digital Content Manager, Marta Sánchez, me ha realizado una entrevista para su blog, titulada “Soporte a las personas en su crecimiento”. En ella tengo la ocasión de contar un poco de mi actividad profesional y hacer un breve resumen de cómo empecé en el mundo del coaching.

A continuación, te transcribo la parte de la entrevista correspondiente a las preguntas. El resto del artículo puedes leerlo en este enlace en su totalidad

José, ¿cuán importante es para ti el autoconocimiento? ¿Cómo te ha ayudado el autoconocimiento a crecer como profesional?

Es fundamental en cualquiera de los ámbitos de la vida, por supuesto también en el área profesional y creo que especialmente cuando alguien trabaja como yo en el ámbito del desarrollo personal. Es necesario saber en todo momento cómo estás y en qué momento vital te encuentras, para dar lo mejor de ti mismo a tus clientes.

Hay que ser especialmente honesto con ello y predicar con el ejemplo, pues si quieres ayudar, lo mejor es que estés en la condición óptima. Una de las 9 creencias de sabiduría de la PNL dice: “Tú eres tu mejor cliente” y otras hablan de lo importante que es ser coherentes y dar ejemplo cuando enseñamos o facilitamos .

En ese sentido, debemos ser como los atletas de élite: entrenar, estudiar y practicar, además de “trabajarnos” nosotros mismos para encontrar el equilibrio y saber cuándo sí y cuando no estamos en nuestra mejor versión, para dar el máximo rendimiento profesional con nuestros clientes.

¿Qué parte de tu equipo de trabajo es esencial? ¿Hay algún elemento que nunca debería faltar?

Estando como estamos en plena era digital de la comunicación, que duda cabe que los dispositivos que nos permiten conectarnos al resto del mundo y acceder a la información en cualquier instante son básicos. Incluso para un coach, porque aunque la esencia de nuestro trabajo pueda parecer en principio muy poco ligada a las herramientas de este tipo, es difícil prescindir del “smartphone” y en mi caso, de un buen ordenador portátil o una buena tablet, que pueda llevar conmigo cuando me desplazo.

He adoptado la agenda digital, mis herramientas de comunicación y marketing son mi web y mis redes sociales e incluso hago un número considerable de sesiones por videoconferencia. La transformación digital también es necesaria para un coach, fundamentalmente porque nuestros clientes también usan esas herramientas digitales. Negarse a ello es, sencillamente, no estar en el mercado.

¿Qué es el coaching y por qué es necesario? ¿Cómo ayuda a la superación de obstáculos?

Es una gran pregunta que yo particularmente me empeño siempre en aclarar (aunque a veces ni me la hagan), debido la confusión que hay con el término a nivel no solo popular, sino incluso en ciertos ámbitos de la empresa.

Respecto a qué es el coaching, lo tengo claro: es una herramienta. Potentísima, la más potente que existe para afrontar los cambios, lograr un amplio desarrollo personal y profesional y mejorar tu rendimiento profesional y vital. Realmente hay un antes y un después en la vida de toda persona que realiza un proceso de coaching.

Pero sigue siendo una herramienta, no lo que intentan vender algunos como “panacea” de todo y para todo, sin que deba hacerse ningún tipo de trabajo por parte del cliente ni intervengan otros profesionales (por ejemplo, si el coach además no es nutricionista, no puede venderse como “coach nutricionista para adelgazar sin esfuerzo”. Es falso y además puede ser peligroso (No olvidemos que tratamos con personas).

Esto ha acercado nuestra imagen a nivel popular poco menos que a la de “gurús”, parecida a la que han divulgado parte de los libros de autoayuda y que no se corresponde, ni mucho menos, con la realidad de la profesión. Por ello mi consejo es que las personas, antes de dejarse deslumbrar por cualquier “título” en una tarjeta o un anuncio, pregunten, se informen y exijan que se documente la formación o la experiencia que se tiene.

El coaching tiene suficiente rigor

El coaching tiene suficiente rigor para, por sí mismo, tener un valor intrínseco formidable en las situaciones de cambio o mejora de rendimiento que antes comentaba. No estoy de acuerdo con ciertas opiniones corporativistas que quieren minimizarlo o ningunearlo, porque tiene su hueco específico y ese hueco es grande.

Es eficaz para encontrar las motivaciones internas, para sacar nuestras fortalezas olvidadas y para desbloquear nuestras autolimitaciones, y todo ello de manera individualizada con cada persona en cada momento vital que se encuentre y con SUS soluciones, no las de otros.

Recordemos que ni es consultoría, ni asesoría, ni mentoring, ni terapia psicológica. Y además lo hace con tremenda rapidez, mucho mayor que en el caso de otros métodos basado más en encontrar causas o presentar modelos estándar de soluciones.

Es cierto que los coaches tenemos que saber dónde están nuestras “líneas rojas”, donde no llegamos por conocimientos y para lo que hay disciplinas mucho más adecuadas (caso de enfrentarse con psicopatologías o enfermedades de la mente).

Por ejemplo, yo nunca intentaría trabajar con un cliente que mostrara un problema de ansiedad declarada, o una fobia profunda de carácter desconocido o un trastorno de conducta. De hecho, los derivo a psicólogos de confianza.

En cambio, para otro tipo de obstáculos (bloqueos, creencias limitantes, excusas, fobias o adicciones menores, autosabotajes, dilemas, comportamientos automáticos, falta de motivación, falta de compromiso, “bajones” emocionales, problemas relacionales o con habilidades sociales,…), el coaching es más rápido y efectivo que otras disciplinas. Así es, está disponible y ha llegado para quedarse.

¿Cómo se complementa la Programación Neurolinguística con el Coaching? ¿Pueden ir separados uno del otro?

Son como el pastel y la guinda ¡perfectos! La PNL y el Coaching se complementan fantásticamente bien y de hecho combinando las dos herramientas se obtienen resultados espectaculares. En honor a la verdad, es mucho más fácil para el coach que domina la PNL trabajar con cualquier tipo de cliente y este obtiene mejores resultados y mucha más rapidez en la resolución de sus dilemas.

Conocer cómo utilizar recursos y fundamentos de la PNL como el modelado, la calibración, el metamodelo, los sistemas representacionales o ciertas técnicas muy efectivas (como la integración de partes o el cambio de creencias), es magnífico para determinar exactamente lo que necesita trabajar el cliente en el proceso, tomar decisiones al respecto y actuar en consecuencia. Buscamos siempre lo mejor para él o ella, por lo tanto, cuanto más rápido llegue a sus objetivos o resuelva sus dilemas y de forma más precisa, mejor.

No obstante, claro que pueden ir por separado. Es verdad que al requerirse una fase inicial de indagación en cualquier actuación, sea la que sea, usar técnicas de coaching para ello (preguntas poderosas, espejo, feedback de alto impacto…) combinadas con las de la PNL específicas (modelado, calibración…), facilita enormemente las cosas al coach y reduce el tiempo que se emplea drásticamente, con lo que el cliente se ve muy beneficiado.

En ese sentido yo creo que sí son inseparables. Pero efectivamente, si se quiere, puede realizarse un proceso de PNL o uno de coaching por separado, aunque, insisto, combinar las dos disciplinas y elegir con criterio cual, en función de para qué y en qué momento del proceso se debe usar, es la mejor solución para cliente y coach.